Envía, Señor, tu Espíritu
que renueve nuestros corazones.
Envíanos, Señor, tu luz y tu calor,
que alumbre nuestros pasos,
que encienda nuestro amor,
envíanos tu Espíritu
y un rayo de tu luz encienda
nuestras vidas en llamas de virtud.
Envíanos, Señor,
tu fuerza y tu valor,
que libre nuestros miedos,
que anime nuestro ardor;
envíanos tu Espíritu,
impulso creador,
que infunda en nuestras vidas
la fuerza de su amor.
Envíanos, Señor, la luz de tu verdad,
que alumbre tantas sombras de nuestro caminar;
envíanos tu Espíritu, su don renovador,
engendre nuevos hombres con nuevo corazón.