¡Oh san Juan Evangelista, glorioso Apóstol del Señor!,
que por vuestra virginal pureza
fuisteis el discípulo amado de Jesús,
y os eligió para ser dejado en su lugar,
cual hijo a su Santísima Madre.
Yo os suplico, entrañable San Juan
me encendáis en el más vivo amor
a Jesús, vuestro amado Maestro
y a su santísima Madre María.
San Juan evangelista:
vos que sentisteis el amor más grande,
incondicional, puro y verdadero,
os suplico intercedáis ante el Señor
para que vuelva hacia mi sus bondadosos ojos,
y me ayude en mis problemas amorosos,
en las dificultades que tengo con la persona que amo
que tanto duelen y me hacen sufrir,
para que me socorra en las angustiosas circunstancias
por las que estoy pasando en estos momentos,
para que me conceda lo antes posible
la gracia que tan ardientemente deseo:
(mencionar ahora la petición)
la salvacion de cuerpo-alma-espiritu
San Juan testigo privilegiado,
también os ruego,
me otorguéis vuestra protección
y que me alcancéis del Señor,
que también yo,
con el corazón libre de afectos mundanos,
sea hecho digno de estar siempre
unido a Jesús cual fiel discípulo
y a María cual devoto hijo,
aquí en la tierra
para seguir siéndolo
después eternamente en el cielo.
Amén.
Rezar tres Padrenuestros, tres Avemarías y tres Glorias.