Libro de Oraciones clásicas
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Libro de Oraciones clásicas:
Oracion por Venezuela

Oración por Venezuela

Jesucristo, Señor nuestro, acudimos a ti en esta hora de tantas necesidades en nuestra patria. Nos sentimos inquietos y esperanzados y pedimos la fortaleza como don precioso de tu Espíritu. Anhelamos ser un pueblo identificado con el respeto a la dignidad humana, la verdad, la libertad, la justicia y el compromiso por el bien común.
Como hijos de Dios danos la capacidad de construir la convivencia fraterna, amando a todos sin excluir a nadie, solidarizándonos con los pobres y trabajando por la reconciliación y la paz.
Concédenos la sabiduría del diálogo y del encuentro, para que juntos construyamos la “Civilización del Amor”, a través de una real participación y de una solidaridad fraterna. Tu nos convocas como nación y te decimos: Aquí estamos, Señor, junto a nuestra Madre, María de Coromoto, para seguir el camino emprendido y testimoniar la fe de un pueblo que se abre a una Nueva Esperanza. Por eso todos juntos gritamos: ¡Venezuela! ¡Vive y camina con Jesucristo, Señor de la historia!

Amén.



Libro de Oraciones clásicas:
SANTA MUERTE

SANTISIMA MUERTE



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SANTA MUERTE

SANTISIMA MUERTE



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SANTA MUERTE

SANTISIMA MUERTE



Libro de Oraciones clásicas:
Regresa al hogar

Yo ofrezco e invoco esta Oración al espíritu del Desespero y al Santo Ángel de la Guarda de jmm yal Santo Ángel de la Guarda de djv para que por el bien de todo y el de ellos mismos, infunda en esta persona odio, rencor, desconfianza y la separación total del uno para con el otro.

Que hagas que nazca en cada uno de ellos odio mortal y desconfianza infinita de jmm para con djv y que jamás pueda el uno recordar el nombre del otro sin sentir odio y rencor por él.

Que hagas que los olores que compartieron juntos y los olores que puedan estar compartiendo en el preciso momento y los pocos momentos que le quedan por compartir sea repugnante para ata y que sea repugnante para ata, que los momentos que compartieron juntos, los momentos que compartieron en este preciso momento y los pocos momentos que le quedan por compartir sean desagradables para ambos. Hagas que si se encuentre no se vean, que si se hablan no se entienda, que de la bocas de ellos solo pueden salir palabras dañinas, reproches y recriminaciones del uno para el otro y que estas sean las únicas palabras que entre ellos puedan entenderse.

Invoco al espíritu del camino para que este separe la ruta de hmm de las rutas de djv , que lo hagas en este preciso momentos, en este preciso instante de hoy por hoy, para mañana y siempre que la separación sea total e inmediata, que así sea, así sea, así sea, así sea. Amen.

UN PADRE NUESTRO.